Conoce Filipinas
Este archipiélago está formado por más de 7,000 islas, muchas de ellas con arena blanca, aguas cristalinas, animales marinos hermosos, lugareños amables y muchas cosas más.
Entre las muchas cosas que puedes hacer en este país, queremos resaltar 5 de ellas para que en tu próxima visita a Filipinas no olvides hacerlas.
Matinloc Shrine
Esta zona es una de las más bellas, sus aguas color turquesa son un verdadero paraíso.
Hay un mirador desde donde puedes admirar los arrecifes de la isla, así que no olvides llevar ropa cómoda y un par de tenis para no cansarte o lastimarte.
Pero no sólo puedes admirar los arrecifes, mejor sumérgete en ellos para una experiencia inigualable.
Si tienes hambre, puedes dar un paseo en barco y comer en alguno de los restaurantes de ahí.
El Nido
La comida es una de las cosas más representativas de este lugar, pues cuenta con muchos restaurantes junto a la playa, así que puedes decidir si comer en el restaurante con vista al mar o directamente en la playa mientras te bronceas.
Nacpan beach
Un lugar perfecto para organizar un picnic pues es una playa virgen, a lo mucho podrás encontrarte a 20 o 30 personas en un día.
Definitivamente es perfecto para pasar unas horas de tranquilidad mientras escuchas las olas del mar y te asoleas.
Se encuentra a 30 minutos de El Nido.
Dejarse hipnotizar por las luciérnagas de Bohol
En Filipinas, una vez que cae la noche, al margen de cenar, ver las estrellas en alguna playa junto a un fuego o acudir a alguna fiesta, poco más puedes llegar a hacer ya que la luz no es que esté demasiado presente en las calles de Filipinas. De hecho no todos los hoteles tienen luz 24 horas.
Sin embargo, en la isla de Bohol puedes participar en una aventura inigualable por el río Loboc en busca de luciérnagas en la más absoluta de las oscuridades.
Conoce a los diminutos tarsiers de Bohol
Otra de las cosas que puedes hacer en Bohol es visitar el santuario de los diminutos Tarsiers.
Los tarsiers son unos monitos chiquititos que apenas caben en la palma de la mano, pesan entre 20-30 gramos y únicamente en esta zona de Filipinas es posible verlos, por lo que la oportunidad es perfecta.
Son extremadamente tranquilos, tienen ojos saltones y dado su tamaño se ocultan muy bien entre las ramas de los árboles. Debes de estar muy atento porque a veces es difícil verlos.
Es importante no hablar fuerte ni acercarse mucho a ellos. No uses flash.