Seguramente cuando escuchas el nombre de este país, en lo primero que piensas es en canguros, koalas o en la Ópera de Sydney.

Australia es mucho más que esto, está lleno de animales maravillosos, sobre todo por los marsupiales, es un lugar donde la naturaleza prevalece sobre manera. También está rodeado por los océanos Pacífico e Índico, lo que le permite gozar de playas hermosas, así como de extensas carreteras. Sea cual sea lo primero que pienses, hay 3 cosas imperdibles para hacer en Australia.

Visitar sus playas:

Hyams Beach es una de las playas más hermosas del mundo, con su arena tan blanca y fina es un lugar al que no puedes faltar en tu visita a este país.

Lucky Bay es otra playa que además de poseer arena blanca y fina, también tiene un mar color turquesa y una experiencia inolvidable, pues en ella habitan canguros en completa libertad, así que podrás verlos muy de cerca.

Rottnest Island es la isla de los quokkas (una especie de marsupial). Para llegar a este sitio, es necesario que tomes un ferry, por lo que es toda una experiencia llegar y estar en ese lugar.

Magnetic Island también es una de las playas donde puedes disfrutar de los koalas en libertad paseando por ellas. Unas noches de charlas frente a la fogata, con cerveza, pizza y unos paisajes y clima, son perfectas para pasarlas en familia o con amigos.

Tasmania es una isla, por lo que conocerás muchísimas playas, además de disfrutar de cascadas y muchos más sitios naturales. Y sí, conocerás de cerca los demonios de Tasmania, pero no como el de la caricatura.

Roadtrips:

La Great Ocean Road es una de las principales carreteras y definitivamente una de las más impresionantes. Son tantos los kilómetros que pasan entre las montañas, que es obvio que un roadtrip en esta carretera es una experiencia única e inolvidable. Disfrutarás de vistas increíbles como diversas formaciones rocosas, cientos de animales en libertad (sobre todo los canguros y koalas), las playas y muchísimas cosas más.

Nullarbor, esta llanura con cientos de kilómetros hacen que parezca que estás perdido a la mitad de la nada, pero vale la pena, pues puedes admirar los enormes y vertiginosos acantilados, con sus atardeceres rojizos, pueblos fantasma e incluso conocer a muchos dingos salvajes.

El Parque Nacional de las Blue Mountains es una escapada de la ciudad, tiene muchos senderos y miradodes que te dejarán impresionado.

Las ciudades y su cultura:

Sydney es una ciudad donde puedes encontrar muchas cosas además de La Casa de la Ópera de Sídney. Tiene edificios, parques, un zoológico con especies en peligro de extinción, una gastronomía hermosa y muchísimas cosas más.

Melbourne, aquí puedes visitar desde mercados y restaurantes para conocer su gastronomía, hasta hacer recorridos por sus plazas y jardines, así como viajar en tren para conocer un bosque.

Adelaide tiene bastante encanto y mucho ambiente nocturno, así como su Chinatown. El vino local es otra de sus cualidades, tiene una de las mejores bodegas de toda Australia. La península de Eyre tiene unos rincones maravillosos y sobre todo, ideales para un recorrido en familia.