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Sri Lanka: la lágrima de India

Esta isla se localiza en el océano Índico, al suroeste de la bahía de Bengala y al sureste del mar de Omán. Está separada del subcontinente indio por el golfo de Mannar y el estrecho de Palk, a menudo llamado Puente de Adán.

 

Un país con un paraíso lleno de colores, aromas, sonrisas y lugares sorprendentes. Con culturas como las Sigiriya, Pollonaruwa, Anuradhapura; playas como Tangalle, Unawatuna, Kalpitiya, por mencionar sólo algunas; naturaleza, como el parque nacional de Yala, las plantaciones de té de Ella y Haputale, y muchísimas cosas más.

 

Uno de los lugares para visitar es Sigiriya. El protagonismo de esta isla se lo lleva la inmensa Roca del León, uno de los símbolos de Sri Lanka. Se sabe que esta enorme piedra volcánica fue habitada hace miles de años y debido a su extraordinaria forma, se eligió como lugar para construir templos. En lo alto de la roca se pueden observar ruinas de esas construcciones.

 

Sube al Adam’s Peak. Es una caminata desde  Carmen de Trajinando hasta la cima de este pico sagrado. Recuerda que debes estar en forma y llevar mucha agua, pues son 5,000 escalones los que debes subir.

 

Pigeon Island es un paraíso marino. Es un parque nacional que ofrece una inmensa variedad de vida acuática, como tortugas y pequeños tiburones. Aunque el mejor mes para ir es junio, pues de octubre a abril difícilmente encontrarás barcos debido al estado del mar.

 

Puedes pasar unos días en una casa del árbol en el Parque de Yala. En el safari podrás ver leopardos, elefantes, búfalos, cocodrilos y un gran número de aves.

Aunque si prefieres ver elefantes en libertad, acude a Minneriya National Park y Udawalawe National Park, dos parques nacionales donde podrás verlos en completa libertad.

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